Resulta que llevaba más de 2 días sin Internet en casa. El router no hacía link. Algún problema de la calle, supuse. Llamé a ONO a las once de la mañana. A la una de la tarde ya me estaba llamando un técnico para visitar mi casa, aunque lo tuve que posponer a las siete de la tarde. A esa hora se presenta un técnico que tras una hora no da con el problema. Sobre las nueve de la noche aparece otro técnico que, después de muchas vueltas, descubre que el cajetín que existe en la azotea del edificio está lleno de agua. Lo cambia y queda todo perfecto sobre las diez de la noche.
En menos de 12 horas la movilización de técnicos y el soporte recibido fueron espectaculares. ¡Enhorabuena ONO!
En menos de 12 horas la movilización de técnicos y el soporte recibido fueron espectaculares. ¡Enhorabuena ONO!